Medusas, por Jope 1978 en Flickr |
Antes del fenómeno internet, los investigadores estaban supeditados a las editoriales para difundir sus artículos científicos. Además del coste que suponía, el tiempo de demora en la publicación era otro factor clave. Por otro lado, el acceso a estos journals eran y siguen siendo costosos, por lo que limita a que otros investigadores puedan nutrirse de dichos artículos, y a su vez, a que estos científicos sean citados en otros estudios similares.
En 2001 se celebró una reunión en Budapest para debatir esta problemática y de ahí surgió la inicativa del Open Access o Acceso Abierto. En ella se promueve un acceso libre a la literatura científica con el fin promover el conocimiento compartido y acelerar los avances científicos. Proponen que los textos científicos estén disponibles en internet de manera gratuita para su consulta, y que éstos se puedan imprimir, descargar, citar... Para los autores de los textos proponen el derecho a ser reconocidos y citados, así como el control sobre la integridad de su trabajo. La idea del Open Access estaba inspirada en proyectos de la década de los 90 como ArXiv.
Fruto de posteriores reuniones surgieron la Declaración de Bethseda (2003) y la Declaración de Berlín (2003). El objetivo de estas reuniones era llegar a un consenso sobre la idea de Open Access, así como